Tras lo ocurrido en las Fiestas de San Nicasio, de nuevo la oposición municipal se enzarza en el debate de la moción de censura al Alcalde.
Nosotros lo definimos como un partido de tenis, en el que, bola para acá bola para allá, unos y otros se lanzan comunicados acusándose mutuamente de dinamitar el proceso.
IU de Leganés ha proclamado expresamente que no pondrá ningún tipo de objeciones (vamos, estaría bueno). Por su parte, ULEG indica que en mayo de 2011 se quiso hacer Alcalde a Carlos Delgado y que luego hubo una vuelta atrás. El Partido Socialista advierte que no admite "chantajes" y que se aplique la “lógica establecida por las urnas” ante la petición “sine qua non” de Carlos Delgado de que Gómez Montoya no sea el candidato propuesto en la moción de censura.
Algunos periodistas y medios de comunicación locales están pronunciando mensajes bastante curiosos e, incluso, imprudentes:
- Unos hablan de un acuerdo de gobierno entre IU y PP de Leganés. Escandaloso en los tiempos que corren y con la equidistancia ideológica de ambas formaciones. No parece creíble. Pero ¿por qué IU tumba la propuesta de ULEG y PSOE de controlar Leganés Gestión de Medios y EMSULE? Unos dicen que quieren algo así como “todo o nada”, pero no a trozos.
- Otros hablan de la posibilidad de que Gómez Montoya intente convencer a tres de los cuatro Concejales de ULEG que necesitaría para la mayoría legal. ¿Podría existir una rebelión interna dentro de ULEG? ¿Quiere aprovecharse el PSOE del posible desasosiego interno de esta Organización Local? Y la pregunta del millón: ¿dejarán solo a Carlos Delgado?
No parecen probables ni una ni otra opción. La lógica impuesta por las urnas, sin duda, es el estrepitoso fracaso electoral del Candidato Gómez Montoya. Que se aparte elegantemente y ceda el mando y la candidatura a alguien que mejor lo merezca. Leganés dijo NO a Gómez Montoya.
“Etceterísimo Señor:
Yo, Gabriel Celaya, aspirante a poeta,
que pase lo que pase siempre estoy donde estoy,
visto su tal y cual del tantos y adelante,
le digo a usted que no”.
Gabriel Celaya
